Era frecuente en las familias reales en siglos pasados el casamiento entre primos y primas por puros intereses políticos, muy distinto a lo que en nuestros días ocurre cuando un principe se casa con una plebeya. Un caso más fue el de Roberto I Duque de Parma, aunque eso si un caso muy peculiar por el número de hijos que tuvo.
Roberto de Borbón-Parma (1848-1907), Duque de Parma (1854-1859) se casó en dos ocasiones y de de cada matrimonio tuvo doce hijos, en total veinticuatro. Fue el último soberano del Ducado de Parma bajo la regencia de su madre Luisa de Borbón, al ser él un niño cuando en 1859 Parma fue anexada al naciente Reino de Italia. Su primer matrimonio fue con su prima María Pía de Borbón-Dos Sicilias. Por desgracia la mitad de esos doce primeros hijos fueron con el tiempo declarados retrasados mentales, muy posiblemente el hecho de que sus padres fueran primos pudo tener una desgraciada repercusión en su descedencia. De su segundo matrimonio con María Antonia de Braganza nacieron otros doce hijos. Lo trágico también es que de esos veinticuatro hijos varios murieron al poco de nacer, algo que era relativamente frecuente, un hecho que en muchas ocasiones generba graves problemas de sucesión. El dato positivo es que la mayoría de ellos tuvieron descendencia, y hete aqui que una de sus tataranietas es muy amiga de un conocido mio, asi que espero poder conocerla algún día y tener la oportunidad de hablar con ella de todo lo que aqui en este blog hoy expongo.
Foto: el duque Roberto con diecisiete de sus hijos (1906).
Imagen: bandera del Ducado de Parma.
Muy interesante esta historia. Aunque no es de lo más peculiar, sí es curiosa,
ResponderEliminar